Elija las plantas adecuadas para su jardín. Esto significa seleccionar variedades que se adapten al clima y al suelo de tu región. Cultive las flores en zonas adecuadas con suficiente luz solar.
Riegue sus flores con regularidad, pero evite sumergirlas en agua. Utiliza también abono. Si notas que tus plantas no crecen con normalidad, ayúdales a crecer dándoles un poco de abono.
Elimina también las malas hierbas que puedan absorber los nutrientes de tus flores. Elimínalas con regularidad.
Retira las flores marchitas y secas. Pueden debilitar las plantas, ya que intentan captar toda la energía. Por tanto, elimínalas sobre la marcha para que la planta pueda concentrarse en crecer.
Proteja sus plantas de diversas enfermedades. Puedes utilizar productos químicos para prevenir las enfermedades. En el caso de algunas plantas, la única forma de salvarlas es eliminar las partes enfermas de la planta.
Una taza de este ingrediente es suficiente para una floración explosiva.
