Modo de uso:
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Espolvorea generosamente 3 cucharadas de bicarbonato sobre la zona afectada.
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Déjalo actuar varias horas, o incluso toda la noche, para máxima eficacia.
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Aspira el polvo con una aspiradora.
Este método no solo elimina los malos olores, sino que también refresca los tejidos.
Optar por un limpiador enzimático para una acción profunda
Si el olor persiste a pesar de una primera limpieza, un limpiador enzimático puede ser la solución ideal. A diferencia de los productos clásicos, estos limpiadores descomponen completamente las proteínas de la orina, impidiendo que los olores regresen.
Por qué usarlo:
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Elimina definitivamente las moléculas responsables del mal olor.
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Actúa incluso sobre manchas antiguas.
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Seguro para animales y superficies.
Cómo aplicarlo:
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Sigue las instrucciones del fabricante y deja actuar el tiempo recomendado para asegurar su eficacia.
Pulverizar generosamente sobre la zona afectada
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Deja actuar al menos 15 minutos (o según las indicaciones del producto).
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Seca con un paño limpio y deja secar al aire libre.
¿Dónde encontrarlo? En tiendas de mascotas o en línea, en forma de spray o espuma.
Lavar y mantener los textiles afectados
Si la orina ha impregnado cojines, cortinas, mantas o ropa, un lavado adecuado es esencial para evitar que el olor persista.
Cómo proceder:
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Lavado a máquina: Añade 2 cucharadas de vinagre blanco junto con tu detergente habitual.
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Remojo: Para textiles que no se pueden lavar a máquina, déjalos en remojo en una mezcla de agua y vinagre antes de enjuagarlos.
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Secado al aire libre: El sol ayuda a eliminar las bacterias y neutralizar los olores de manera natural.
