El rock no es solo música; es una forma de vida. Esa energía intensa, el sudor y la adrenalina que acompañan cada riff de guitarra y cada salto hacen que muchas veces terminemos cubiertos de sudor… y algo más. Pero aunque la ducha parezca el mejor remedio después de tanta intensidad, hay momentos en los que lo mejor es esperar antes de dejar que el agua caiga sobre ti.
A continuación, te contamos cinco situaciones en las que deberías pensarlo dos veces antes de ducharte, incluso si te sientes como recién salido de un festival. No se trata solo de higiene, sino también de cuidar tu salud y bienestar. ¡Prepárate para descubrirlo!