No necesita mantequilla ni leche: el bustrengolo, el dulce tradicional de las monjas, es saciante y saludable para el corazón. En el convento, lo preparaban sin nada, ¡y aun así es uno de los postres más deliciosos!

Un postre que huele a hogar y a tiempos pasados: bustrengolo. Es una receta campesina tradicional, hecha con harina de maíz, manzanas y frutos secos, creada para aprovechar al máximo cada ingrediente y brindar un sabor reconfortante.

En el monasterio, lo preparaban cuando llegaba el otoño, el aire se volvía fresco y el horno se convertía en el centro del hogar. Es un postre sencillo, pero encierra toda la bondad y los recuerdos de la vida cotidiana.

Pastel rústico de maíz, manzana y frutos secos: un postre tradicional, saludable y aromático

Pastel de manzana y frutos secos

Tiempo de preparación: 15 minutos

Reposo de la masa: 4 horas

Cocción: 50 minutos

Total: Aproximadamente 5 horas (el tiempo de reposo es obvio)

Raciones: 8

Calorías: Aproximadamente 230 kcal por rebanada

Ingredientes

400 g de harina de maíz fina

½ sobre de levadura en polvo

Ralladura de 1 limón sin encerar

3 cucharadas de licor de naranja (o zumo si prefiere una opción sin alcohol)

2 manzanas cortadas en dados

100 g de nueces picadas gruesas

30 g de piñones

100 g de pasas remojadas en agua caliente

2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

150 g de eritritol, sirope de agave o sirope de arce (o azúcar)

Azúcar glas para decorar Guarnición (opcional)

Agua tibia al gusto para una consistencia suave

Preparación
Preparar la base.

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