Con calabaza, ricotta y chocolate, preparo el mejor postre otoñal de todos los tiempos: ¡se mezclan todos los ingredientes y siempre queda perfecto!

Un postre con aroma a otoño: suave, jugoso y con un delicioso corazón.

El aroma de la calabaza recién horneada, la cremosidad de la ricotta y el toque fundente del chocolate: este pastel de ciruelas captura la esencia del otoño. Suave, nutritivo y perfecto tanto para el desayuno como para la merienda, es una receta sencilla pero impresionante: una que prepararás una vez y querrás repetir siempre.

Pastel de Ciruelas Suave con Calabaza, Ricotta y Chocolate

Tiempo de preparación: 20 minutos

Tiempo de cocción: 45 minutos

Tiempo total: aproximadamente 1 hora y 10 minutos

Porciones: 8 rebanadas

Molde recomendado: 25 x 10 cm

Calorías
Aproximadamente 210 kcal por rebanada (varía según el tipo de chocolate y ricotta).

Un postre nutritivo y ligero, gracias al uso de eritritol y ricotta en lugar de mantequilla y azúcares refinados.

Ingredientes

300 g de pulpa de calabaza limpia

200 g de ricotta (también light)

100 g de yogur griego

100 g de eritritol (o azúcar de caña integral)

50 g de mantequilla derretida

180 g de harina de trigo

100 g de chocolate negro 70%, picado grueso

3 huevos

16 g de levadura en polvo

1 pizca de sal

1 pizca de canela molida

1 pizca de vainilla natural

Preparación

1. Cocinar la calabaza

Lavar la calabaza, cortarla en cubos y colocarla en una bandeja de horno forrada con papel vegetal. Cubrir con papel de aluminio y hornear a 200 °C durante unos 20 minutos, hasta que esté blanda. Dejar enfriar y triturar hasta obtener una crema suave.

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