Tan suave, pero sin harina, este pastel te encantará. Pero lo que te hará aún más feliz es saber que es ligero. Solo contiene 100 calorías por porción.
Se prepara en solo 10 minutos, se hornea como máximo una hora y se deja enfriar, y disfrutarás de un postre extraordinario. Suave y esponjoso, hecho con huevos ligeramente batidos y yogur, se asemeja a un suflé. De hecho, ¡podríamos considerarlo un postre “inflado”! No contiene gluten y es perfecto para celíacos.
Elige un molde pequeño, de no más de 18 centímetros, para obtener el máximo rendimiento.
Este pastel sorprenderá a los más pequeños por su magnificencia, cremosidad y suavidad, pero los adultos también apreciarán su sabor delicado pero completo, que satisfará incluso a los paladares más exigentes.
Ofrécelo a tus viejos amigos al final de una reunión; quedarán encantados.
¿A qué esperas? ¡Manos a la obra, que empezamos!
Pastel de yogur suave: Ingredientes y preparación
Para esta receta, necesitarás:
350-400 g de yogur griego
3 cucharadas de edulcorante de stevia (o 6 cucharadas de azúcar común o de caña)
4 huevos
3 cucharadas de maicena
1 cucharadita de levadura química
Suficiente azúcar glas para espolvorear
Precalienta el horno a 170 °C (340 °F). Forra un molde redondo para pastel de 16-18 cm (6,5-7,5 pulgadas) con papel de horno. Presiona firmemente contra el fondo y los lados.
Rompe los huevos, separando las yemas de las claras en dos boles separados. Agrega la stevia o el azúcar a las yemas y bate durante 5 minutos con una batidora de mano. Una vez que la mezcla esté bien formada y suave, agrega la fécula y la levadura, mezcla bien y, por último, agrega el yogur. Mezcla hasta que la mezcla esté suave y sin grumos. Tenlo a mano.
Bata las claras de huevo con una batidora eléctrica hasta que estén bien espumosas y firmes, luego añádalas a la mezcla de yemas. Hágalo con cuidado para no arruinar su textura suave. Con paciencia, usando una espátula, mueva la mezcla suavemente de abajo hacia arriba. Este paso es muy importante porque asegurará un pastel muy alto y esponjoso.
Transfiera la mezcla al molde, revolviéndola para distribuirla uniformemente y eliminar las burbujas de aire. Hornee a 170 °C durante 50 minutos, luego reduzca la temperatura a 140 °C y hornee durante 10 minutos más. Apague el horno y deje que el pastel se enfríe durante 10 minutos.
Nunca lo abra durante el horneado; el aire y la humedad afectarán su calidad.
Retírelo del horno y déjelo enfriar, luego desmóldelo, espolvoréelo con azúcar glas y ¡a disfrutar!