El agua de papa, ese líquido que muchas veces se desecha al hervir o rallar papas, esconde propiedades medicinales que han sido aprovechadas desde tiempos antiguos. Rica en nutrientes esenciales, esta agua puede mejorar la digestión, aliviar problemas de piel, nutrir el cabello y mucho más.
A continuación, conocerás qué es el agua de papa, cómo prepararla correctamente y cuáles son sus beneficios más destacados tanto para uso interno como externo.
¿Qué es el agua de papa?
El agua de papa es el líquido que se obtiene al hervir papas o al extraer el jugo de la papa cruda. Aunque suele descartarse, contiene minerales como potasio, magnesio, fósforo, hierro, enzimas digestivas, antioxidantes y vitaminas, especialmente del complejo B y vitamina C.
Existen dos formas de obtenerla:
Hervida: al cocinar papas con cáscara en agua.
Cruda: al rallar la papa y exprimir su jugo.
Ambas versiones son útiles, dependiendo del objetivo: consumo interno o aplicación externa.
Receta 1: Agua de papa hervida (uso interno)
Ingredientes:
2 papas medianas con cáscara (bien lavadas)
1 litro de agua
Preparación: