El cheesecake japonés es famoso por su textura ligera, aireada y esponjosa, diferente al
cheesecake tradicional. Su secreto está en el batido de claras de huevo a punto de nieve y la cocción en baño maría que garantiza un pastel suave y húmedo.
Ingredientes
-
250 g de queso crema (suavizado)
-
50 g de mantequilla sin sal (suavizada)
-
100 ml de leche
-
60 g de harina para pastel (o harina común)
-
20 g de fécula de maíz (maicena)
-
6 huevos grandes (separados, a temperatura ambiente)