Un postre irresistible que combina la suavidad del queso crema con la delicadeza de la crema pastelera, sobre una corteza mantecosa. Mitad tarta de queso, mitad flan, ideal para fiestas, reuniones o un capricho especial.
Por qué te encantará esta receta
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No necesita baño maría: más fácil que la tarta de queso tradicional.
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Dos capas irresistibles: queso cremoso + crema pastelera esponjosa.
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Textura perfecta: firme para cortar, suave para derretirse en la boca.
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Sabe aún mejor si se prepara con anticipación y se refrigera toda la noche.
Ingredientes
Para la corteza de mantequilla
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1 ½ tazas (190 g) de harina de todo uso
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½ taza (100 g) de azúcar granulada
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½ taza (115 g) de mantequilla fría, en cubos
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1 cucharadita de extracto de vainilla