Las mollejas de pollo son de esos ingredientes que despiertan curiosidad y dividen opiniones. Algunos las aman por su textura y sabor únicos, mientras que otros las miran con desconfianza, sin saber realmente qué son ni los beneficios que ofrecen.
Lo cierto es que este pequeño órgano, tan humilde como económico, esconde grandes aportes nutricionales y una historia fascinante. Si alguna vez las has probado bien cocinadas —ya sea guisadas, fritas o al ajillo—, sabes que tienen un encanto muy particular.
📌 IMPORTANTE: El video relacionado a esta historia lo encontrarás al final del artículo.
🦴 1. ¿Qué son realmente las mollejas de pollo?
La molleja es una parte del sistema digestivo del ave: un órgano muscular potente que se encarga de triturar los alimentos, ya que las aves no tienen dientes. En su interior, las mollejas utilizan pequeñas piedrecitas o fragmentos de alimento para realizar esa función.
Esta característica les da su textura firme y elástica, lo que explica por qué necesitan cocción lenta para quedar tiernas y jugosas.
En muchos países —desde América Latina hasta Asia— son consideradas un manjar económico y sabroso.
👉 Bien cocinadas, las mollejas se transforman en una carne suave, llena de sabor y con un toque irresistible.