Reduce el colesterol malo, limpia las arterias, regula el azúcar en sangre y suprime el hambre
En el mundo de la nutrición, a menudo se dice que los pequeños cambios pueden producir grandes resultados. Una de las formas más sencillas de mejorar tu salud sin esfuerzos extremos es incorporar una sola cucharada diaria de un alimento o suplemento natural. Puede parecer poco, pero esa pequeña dosis puede marcar la diferencia: ayuda a reducir el colesterol malo (LDL), limpiar las arterias, regular el azúcar en sangre e incluso controlar el apetito.
A continuación, te explicamos cómo esta práctica puede convertirse en tu nuevo hábito saludable favorito.