«Durante el cambio de vendajes de hoy, ha mostrado una mejora notable en el aspecto de su cara. Mientras Buddy sigue curándose, está aprendiendo algunas órdenes básicas».
«Este perro dulce y amistoso no se merecía lo que le pasó», escribieron en Facebook. «No era una amenaza para nadie. Fue un acto extremadamente cruel y premeditado».
«Esperamos que las horribles lesiones de Buddy no hayan sido en vano. Que, de alguna manera, algo bueno salga de esta tragedia. Que haya un cambio y se haga justicia en casos como el de Buddy».
Latest Update on Buddy❤He’s doing great. Healthy body, happy heart. His latest picture speaks volumes about how he…
Posted by Tunica HumaneSociety on Wednesday, August 4, 2021
Desde que la historia de Buddy se hizo viral hace unos años, ha seguido avanzando y ha recibido los mejores cuidados de los veterinarios de Mississippi State. Se sometió a injertos de piel para curar sus quemaduras y cada vez necesitaba menos vendajes. Poco a poco, volvió a ser el de siempre.
«Ahora que ya no tiene las orejas vendadas, está mucho más feliz y juguetón. Estoy segura de que está sintiendo mucha alegría al recuperar poco a poco su vida normal», informó la Sociedad Protectora de Animales de Tunica el mes pasado.
Y el 7 de agosto, el centro de rescate anunció un «gran punto de inflexión» en la recuperación de Buddy.
Our Latest Update on Buddy❤I just received these new pictures of Buddy from Mississippi State. He was out enjoying a…
Posted by Tunica HumaneSociety on Monday, July 12, 2021
Por primera vez, los vendajes de Buddy, que le habían cubierto completamente los ojos desde el ataque, se le quitaron sin necesidad de sedarlo profundamente, lo que significaba que, por primera vez en más de tres meses, Buddy podía ver.
«Tenía los ojos abiertos y estaba muy consciente», escribió la Sociedad Protectora de Animales. «En respuesta a sus miles y miles de oraciones, SÍ, Buddy todavía puede ver».
«El último recuerdo real que Buddy tiene de su visión fue en los horribles momentos finales, justo antes de que un niño le prendiera fuego a la cara. En un abrir y cerrar de ojos, toda la vida de este perro cambió».