Las várices afectan a millones de personas en todo el mundo. Son venas inflamadas que pierden la capacidad de llevar la sangre de regreso al corazón de manera eficiente, provocando dolor, cansancio, pesadez, hinchazón y, en casos avanzados, problemas circulatorios graves.
Aunque existen tratamientos médicos, muchas personas buscan soluciones naturales que hayan funcionado por generaciones. Y entre las más efectivas se encuentra una combinación sorprendente: ajo + clavos de olor. Dos ingredientes sencillos, económicos y presentes en casi cualquier cocina, pero con propiedades medicinales profundamente poderosas.
Muchos testimonios aseguran que esta mezcla ayuda a mejorar la circulación, desinflamar las venas, reducir el dolor y aliviar la pesadez. Además, estos dos ingredientes no solo actúan en las várices: también protegen el corazón, fortalecen la inmunidad y mejoran la digestión.
Receta del Aceite de Ajo con Clavos de Olor para las Várices
Ingredientes:
• 5 dientes de ajo frescos
• 10 clavos de olor enteros
• ½ taza (100 ml) de aceite de oliva extra virgen
• 1 frasco de vidrio con tapa
Preparación:
- Pela los dientes de ajo y machácalos ligeramente para activar sus compuestos.
- Colócalos en el frasco junto con los clavos de olor.
- Vierte el aceite de oliva hasta cubrir todo.
- Tapa bien y deja reposar en un lugar oscuro por 7 días.
- Tras ese tiempo, el aceite estará listo para usar.
Modo de uso:
• Aplicación externa: masajea las piernas de abajo hacia arriba todas las noches antes de dormir.
• Consumo opcional: toma 1 cucharadita en ayunas, 3 veces por semana, para potenciar sus efectos circulatorios y antiinflamatorios.
Duración recomendada del tratamiento:
Úsalo durante 4 a 6 semanas continuas. Descansa 7 días y repite si es necesario.
Otros Remedios Alternativos con Ajo y Clavos
1. Infusión para circulación y digestión