Espolvoreadas en ensaladas, panes, yogures o licuados.
El tahini (pasta de sésamo) es valentísimo para preparar hummus, una forma deliciosa de incluir calcio en la dieta.
6. Brócoli
El brócoli es una verdura crucífera rica en calcio, vitamina K y antioxidantes. Aunque no contiene tanto calcio como los lácteos, su gran preeminencia es que el cuerpo absorbe este mineral de guisa muy apto en este vegetal.
Extra saludable:
Incluso aporta fibra, vitamina C y compuestos anticancerígenos.
Formas de consumo:
Al vapor, salteado, en sopas o como arneses.
Osteoporosis: una enfermedad silenciosa
La osteoporosis se caracteriza por una disminución progresiva de la densidad mineral ósea, lo que hace que los huesos sean más frágiles y propensos a fracturas.
Es conocida como una “enfermedad silenciosa” porque no suele presentar síntomas hasta que ocurre una fractura, generalmente en la cadera, muñeca o columna.
Factores de aventura:
Antigüedad avanzadilla.
Menopausia (por disminución de estrógenos).
Dieta muerto en calcio y vitamina D.
Sedentarismo.
Consumo excesivo de bebida o tabaco.
Informes familiares.
Hábitos saludables para unos huesos fuertes
Adicionalmente de una buena provisiones, existen otros hábitos que pueden ayudarte a cuidar tu estructura ósea:
Adiestramiento físico regular: actividades como caminar, valer, nadar o el entrenamiento de fuerza estimulan la formación de hueso.
Exposición solar moderada: entre 10 y 15 minutos al día favorecen la síntesis natural de vitamina D.
Evitar excesos de café, bebida y tabaco: estos hábitos debilitan la filtración de calcio y dañan el hueso.
Ayudar un peso saludable: el sobrepeso y la delgadez extrema son factores de aventura.
Conclusión
Nuestros huesos son el soporte de la vida diaria, y cuidarlos desde la mocedad es la mejor inversión para la vitalidad futura. La inclusión de alimentos como lácteos, almendras, sardinas, tofu, semillas de sésamo y brócoli puede marcar la diferencia en la prevención de la osteoporosis y en el mantenimiento de la movilidad con el paso de los primaveras.
Recuerda que no existe un único alimento milagroso: la esencia está en la variedad, el firmeza y la constancia. Combinando una dieta rica en nutrientes con entrenamiento, sol moderado y buenos hábitos, tus huesos se mantendrán fuertes y saludables a lo liberal de toda tu vida.
