Relájate y deja que la mascarilla actúe: déjala actuar de 20 a 30 minutos. Sentirás una ligera sensación de tirantez al secarse.
Enjuague: Enjuague suavemente la mascarilla con agua tibia. Seque el rostro con palmaditas suaves con una toalla.
Hidratación: Aplica tu crema hidratante favorita para retener la hidratación. ¿Con qué frecuencia debes usarla?
Para obtener mejores resultados, usa esta mascarilla 2 o 3 veces por semana. Su uso regular mejorará significativamente la textura y el tono de la piel.
Córtalo por la mitad y extrae 2 cucharadas de gel. Colócalo en un bol.
Separa la clara de la yema: rompe un huevo y separa con cuidado la clara de la yema. Agrega la clara al bol.
Agrega el jugo de limón: exprime el jugo de un limón fresco y mide 1 cucharadita. Añádelo a la mezcla.
Mezcla la miel y el aceite de oliva: agrega 1 cucharadita de miel cruda y 1 de aceite de oliva.
Mezclar bien: utilizando un batidor o un tenedor, mezclar los ingredientes hasta obtener una mezcla suave y cremosa.
Modo de empleo :