Este bacalao con gambas y champiñones al ajillo seduce por su aroma intenso y su jugosidad. El lomo de bacalao se dora suavemente para mantenerlo meloso, mientras el salteado de ajos, champiñones y un toque de guindilla crea una salsa sabrosa que se equilibra con vino blanco y caldo de pescado. Las gambas se incorporan al final para que queden tiernas y brillantes, y un puñado de perejil fresco aporta el acabado perfecto. Es un plato rápido, elegante y lleno de sabor mediterráneo, ideal para una comida especial o una cena con pan crujiente para mojar cada gota de la salsa.
1. Seca muy bien el bacalao con papel de cocina. Si usas bacalao en salazón, desálalo previamente 24–48 h cambiando el agua en la nevera. Sala con moderación (el bacalao ya aporta sal) y pimienta por ambos lados.
2. Pasa las porciones de bacalao por una fina capa de harina, sacudiendo el exceso. Este paso ayuda a sellar los jugos y a espesar ligeramente la salsa.
Atún a la Parrilla
Salmón en Salsa de Leche de Coco