En medio de esta confesión, Britney también aprovechó para responder a las declaraciones de su exesposo, Kevin Federline, quien recientemente lanzó un libro titulado You Thought You Knew, en el que habla sobre su vida junto a la cantante. Spears afirmó que muchas de las versiones que circulan sobre ella son falsas o tergiversadas, y que aún hay aspectos de su historia que ha preferido mantener en silencio: “Hay mucho que no compartí en mi libro y cosas que aún mantengo ocultas porque son increíblemente dolorosas y tristes”.
Federline, por su parte, asegura en su publicación que durante su relación con Britney hubo momentos preocupantes relacionados con su salud emocional y el entorno familiar, incluso mencionando episodios en los que sus hijos “sentían miedo” de su madre. Estas declaraciones reavivaron la polémica sobre los años más complicados de la artista, aunque ella sostiene que se trata de una narrativa distorsionada.
Hoy, Britney Spears intenta enfocarse en su bienestar físico y mental, dejando atrás los episodios de control y sufrimiento que marcaron su pasado. A través de sus palabras, deja claro que, pese al daño cerebral y a las secuelas que enfrentó, ha logrado encontrar nuevamente la fortaleza y libertad que durante tanto tiempo le fueron arrebatadas.
Su historia es, una vez más, la de una mujer que lucha por reconstruirse y ser escuchada, demostrando que, aun en medio del dolor, su voz y su espíritu siguen más vivos que nunca.