Cómo Hacer Guiso de Carne con Patatas Paso a Paso
Ahora que tienes todo listo, sigue estos pasos con calma y cariño para conseguir un guiso perfecto que hará que todos repitan plato.
🔹 Paso 1: Sellar la carne
Corta la carne en trozos grandes y sécala con papel de cocina.
Sazona con sal y pimienta.
En una cazuela amplia, calienta aceite de oliva y dora la carne por todos sus lados hasta que esté bien caramelizada.
✅ Este paso potencia el sabor de todo el guiso.
🔹 Paso 2: Sofreír los vegetales
Retira la carne y, en la misma cazuela, sofríe la cebolla, el ajo, las zanahorias y el apio a fuego medio hasta que se ablanden y doren.
🔹 Paso 3: Armar el guiso
Vuelve a incorporar la carne.
Añade las patatas y vierte el vino tinto. Cocina unos minutos hasta que el alcohol se evapore.
Agrega el caldo, el laurel y el tomillo. Remueve todo muy bien.
🔹 Paso 4: Cocinar a fuego lento
Tapa la cazuela y cocina a fuego bajo durante 2 horas.
Revisa de vez en cuando y añade más caldo o agua caliente si hace falta.
🕒 Cuanto más lento y largo el cocinado, más tierna queda la carne y más rica la salsa.
🔹 Paso 5: Rectificar y servir
Prueba y ajusta sal y pimienta.
Retira las hojas de laurel.
Sirve caliente, con arroz blanco, pan crujiente o por sí solo. ¡Es pura delicia!
Sin vino? Usa más caldo y un chorrito de vinagre balsámico o limón.
🥄 ¿Salsa muy líquida? Sube el fuego sin tapa los últimos 10 minutos para espesarla.
🌿 Añade perejil fresco al final para un toque de color y aroma.
❄️ ¿Sobró? Guarda en el refrigerador: al día siguiente está aún más sabroso.
❓ Preguntas frecuentes
¿Puedo usar otro tipo de carne? Sí, también queda muy bien con cerdo o pollo, ajustando los tiempos de cocción.
¿Se puede congelar? Claro, congélalo en porciones y caliéntalo a fuego lento para mantener la textura.
¿Qué acompañamientos le van bien? Pan crujiente, arroz blanco o una ensalada fresca son opciones perfectas.
🍽️ Un Guiso de Siempre, con Sabor a Hogar
Este plato clásico de carne con patatas guisadas es mucho más que una receta: es un recuerdo familiar, una comida abundante, una forma de decir “te quiero” con cuchara. Perfecto para días fríos, domingos sin prisa o cualquier momento donde el cuerpo y el corazón necesiten un poco de calor casero.
¿Te animas a prepararlo esta semana? ¡No olvides el pan para la salsa!