La vida moderna puede ser agotadora. Colocar hojas de laurel bajo la cama es una práctica sencilla que, según la tradición, ayuda a aliviar el estrés y a mantener un ambiente armonioso en el dormitorio.
El aroma que emana durante la noche contribuye a crear una atmósfera de paz interior y descanso emocional.
🌙 3. Protección y sabiduría tradicional
Esta costumbre tiene raíces en antiguas culturas mediterráneas y orientales. Se creía que el laurel era una planta protectora contra las malas energías y los malos sueños.
Dormir con hojas de laurel debajo de la cama era una forma simbólica de mantener alejadas las pesadillas y atraer buenas vibraciones al hogar.
A día de hoy, muchas personas siguen esta tradición para dormir más tranquilas y con sensación de protección espiritual.
✨ 4. Energía positiva y bienestar general
El laurel es considerado un símbolo de victoria, limpieza y prosperidad. Colocarlo bajo la cama ayuda, según creencias populares, a purificar el ambiente y atraer energía positiva.
Algunos aseguran que este pequeño gesto mejora el estado de ánimo y fomenta una sensación de bienestar general al despertar.