El agua oxigenada, también conocida como peróxido de hidrógeno, puede reducir el aspecto de las manchas de lejía, especialmente en tejidos sintéticos o jeans.
Modo de uso:
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Vierte unas gotas de agua oxigenada sobre un paño limpio.
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Tampona suavemente la mancha para que el producto penetre en el tejido.
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Deja actuar unos minutos.
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Lava luego la prenda en lavadora para eliminar los restos.
⚠️ Atención: el agua oxigenada puede tener un efecto blanqueador. Siempre haz una prueba en una zona oculta antes de aplicarla directamente sobre la mancha.
3. ⚗️ Amoníaco: solución de último recurso
El amoníaco es un producto químico muy potente que puede neutralizar las manchas de lejía más persistentes. Sin embargo, debe usarse con precaución.
Cómo usarlo:
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Diluye una cucharada de amoníaco en un litro de agua.
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Empapa un paño limpio con esta solución.
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Tampona la mancha sin frotar.
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Enjuaga bien la prenda con agua fría.
El amoníaco debe utilizarse solo como último recurso, ya que puede dañar algunas fibras textiles. Asegúrate de manipularlo en un lugar bien ventilado y usa guantes.