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Moderación: No usar más de 2–3 veces por semana.
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No frotar demasiado: El abuso del ajo y el bicarbonato puede erosionar el esmalte.
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Dientes sensibles: Evitar en caso de sensibilidad dental o encías irritadas.
Conclusión
El ajo es un remedio natural eficaz para mantener los dientes limpios y blancos, gracias a sus propiedades antibacterianas y antisépticas. Con precaución, es una alternativa sencilla y económica a los productos químicos de blanqueamiento.