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Preparar la mezcla:
Mezcla 2-3 cucharadas de bicarbonato de sodio con un poco de agua caliente hasta formar una pasta espesa. -
Aplicar sobre la olla/sartén:
Extiende la pasta sobre las manchas quemadas o el fondo ennegrecido. -
Dejar actuar:
Deja reposar 5-10 minutos para que el bicarbonato afloje la suciedad adherida. -
Frotar suavemente:
Con una esponja o estropajo suave, frota el área en círculos. La suciedad debería desprenderse con facilidad. -
Enjuagar y repetir si es necesario:
Lava la olla con agua caliente y jabón. Si quedan restos, repite el proceso.
Consejo extra: Para manchas muy rebeldes, añade un chorrito de vinagre a la pasta de bicarbonato; la reacción efervescente ayuda a desprender la suciedad más rápido.