Cambiá el relleno según lo que tengas: jamón y queso, verduras cocidas o pollo desmenuzado.
Agregarle unas semillas de sésamo por fuera les da un toque crocante y diferente.
Estas bolitas de arroz son una solución práctica y sabrosa que te salva cualquier comida.
Se pueden preparar con antelación y conservar en la heladera listas para freír o calentar.
Animate a probarlas con diferentes rellenos y hacelas parte de tu recetario de todos los días.