Probablemente lo hayas bebido a menudo en la montaña, quizás junto a una estufa de leña. Pero incluso si no estás de vacaciones esquiando, puedes intentar recrear ese ambiente preparando vino caliente en casa. Es mucho más fácil de lo que crees.
El vino caliente, conocido como Vin Chaud en Francia y Glühwein en Alemania, es una bebida cálida y reconfortante, perfecta para entrar en calor durante los meses de invierno. Tanto si estás esquiando en la montaña como si simplemente te apetece una bebida caliente en las frías noches de invierno, el vino caliente siempre es una opción ganadora. Con su bajo contenido alcohólico (ya que la mayor parte del alcohol se evapora durante la preparación) y su sabor rico, especiado y afrutado, es un éxito para casi todos.
Si no quieres esperar a tus próximas vacaciones de esquí, ¡puedes prepararlo fácilmente en casa! Aquí te explicamos cómo, con un pequeño consejo: como la receta también lleva cáscaras de fruta, es mejor elegir ingredientes orgánicos y lavarlos bien.
Ingredientes para el vino caliente
1 litro de vino tinto
2 ramas de canela
200 g de azúcar
9 clavos de olor
1 anís estrellado
Una pizca de nuez moscada
1 1/2 naranjas orgánicas
1/2 limones
1 manzana orgánica
Cómo preparar vino caliente
