Utilice las manos o un paño para aplicar la pasta a los gabinetes.
Para áreas detalladas o lugares difíciles de alcanzar, use un cepillo de dientes viejo para frotar la solución en las grietas.
Paso 3: Quitar la suciedad
Frote suavemente los gabinetes con movimientos circulares, concentrándose en las áreas que estén particularmente sucias o aceitosas.
Paso 4: Limpiar los gabinetes
Después de fregar, limpie el exceso de solución con una toalla ligeramente húmeda.
Enjuague el paño según sea necesario para asegurarse de eliminar todos los residuos.
Paso 5: Siéntete orgulloso de tu trabajo
¡Relájate y admira tus gabinetes relucientes! La combinación de bicarbonato de sodio y aceite de coco elimina eficazmente la grasa y deja un acabado brillante.Por qué este enfoque es confiable
Aceite de coco: no solo ayuda a descomponer la grasa y la suciedad, sino que también deja un brillo suave en la superficie.
Bicarbonato de sodio: este abrasivo natural elimina suavemente la suciedad sin dañar el acabado del gabinete.
