Algunas variedades de cerezo necesitan otro árbol compatible cercano para que la polinización (y, por tanto, la fructificación) sea efectiva. Las abejas son las principales responsables de este proceso.
Si solo tienes espacio para un árbol, elige variedades autofértiles como ‘Stella’, ‘Sunburst’ o ‘Lapins’.
Si dispones de espacio, combina dos variedades compatibles para aumentar la producción.
8. Plagas y enfermedades comunes
El cerezo puede verse afectado por diversas plagas y enfermedades. La prevención es clave.
Plagas
- Mosca de la cereza (Rhagoletis cerasi): pone sus huevos en las frutas, que se llenan de larvas. Usa trampas amarillas o redes protectoras.
- Pulgones: se alimentan de la savia de los brotes tiernos. Controla con jabón potásico o aceite de neem.
- Orugas y gorgojos: pueden dañar hojas y frutos. Revisa periódicamente las ramas.
Enfermedades
- Monilia (podredumbre parda): provoca marchitez de flores y frutos. Evita el exceso de humedad y poda las ramas afectadas.
- Cribado: pequeñas manchas redondas en las hojas que luego caen. Aplica cobre en invierno.
- Gomosis: exudación de resina en el tronco. Puede deberse a heridas o exceso de agua; conviene mejorar el drenaje y desinfectar cortes.
9. Cosecha y conservación
Las cerezas maduran entre mayo y julio, según la variedad y la región. Deben recolectarse cuando estén firmes, brillantes y con un color intenso.