Dale forma a los bizcochos de soletilla sobre una bandeja de horno forrada con papel de horno usando una manga pastelera.
Espolvorear con azúcar glas y hornear en horno precalentado a 180°C durante unos 10-12 minutos, hasta que estén dorados pero suaves al tacto.
La combinación perfecta
: El montaje del tiramisú también es importante. Sigue estos pasos para lograr un postre equilibrado:
Sumerge rápidamente los bizcochos de soletilla en el café frío sin azúcar.
Colócalos en una fuente para horno, formando una capa compacta.
Cúbrelos con una generosa capa de crema de mascarpone.
Repite la operación, alternando los bizcochos de soletilla con la crema.
Termina espolvoreando generosamente con cacao amargo en polvo tamizado.
Cannavacciuolo recomienda dejar reposar el tiramisú en el refrigerador durante al menos 12 horas, preferiblemente toda la noche. Esto permite que los sabores se integren y que la crema se endurezca.
Consejos del chef para un tiramisú con calidad de restaurante
Utilice huevos más frescos, preferiblemente orgánicos.
No utilices crema batida: “aligera” el plato pero cambia el sabor tradicional.
