La piña es una de las frutas más refrescantes y nutritivas, perfecta para comer sola, en jugos o en postres. Pero, ¿quién no se ha llevado la decepción de comprar una que parece perfecta por fuera y resulta ácida o insípida por dentro?
Elegir bien no solo asegura un mejor sabor, sino también una mejor experiencia gastronómica y un mayor aprovechamiento de sus beneficios para la salud. Con algunos trucos simples, podés aprender a identificar cuándo una piña está realmente dulce y lista para disfrutar.
Trucos para saber si una piña es dulce antes de comprarla
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Observá el color de la cáscara
Una piña madura y dulce suele tener un tono amarillo dorado uniforme en la base y los costados. Si está demasiado verde, probablemente todavía no alcanzó su punto óptimo. -
Revisá la base
Sentí la parte inferior de la piña. Si desprende un aroma dulce y agradable, es una señal clara de madurez. Si no huele a nada, aún está verde; si huele demasiado fuerte o fermentado, puede estar pasada. -
Chequeá las hojas
Tirar suavemente de una hoja del centro es un buen truco: si se desprende con facilidad, la fruta está en su punto justo. -
Probá el peso
Una piña madura se siente más pesada de lo que parece por su tamaño. Esto indica que está cargada de jugo y, por lo tanto, será más dulce. -
Examiná la textura
Presioná suavemente la cáscara. Debe ceder un poco al tacto, sin estar demasiado blanda ni dura como una piedra.