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Calienta la manteca o aceite en una sartén amplia a fuego medio (160–170 °C si usas termómetro).
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Coloca las costillas sin encimarlas y fríelas tapadas 10–15 minutos, volteando de vez en cuando.
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Destapa, sube el fuego a medio-alto y fríe 5–8 minutos por lado hasta que estén bien doradas y crujientes.
4️⃣ Escurrir y servir
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Retira las costillas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
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Sirve al momento, acompañadas de tortillas de maíz, limones partidos y, si deseas, una salsa picante aparte.
🌟 Resultado: Costillas con grasa crujiente que truena al morder y carne jugosa, llenas de sabor. Perfectas para cualquier comida especial.