Ingredientes:
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1 cucharada de miel pura (hidratante y antioxidante)
½ cucharadita de aceite de coco (nutritivo y suavizante)
Preparación:
Aplique sobre el rostro limpio, evitando el contorno de ojos.
Deja actuar de 5 a 10 minutos.
Enjuaga con agua tibia y seca suavemente con una toalla.
Finaliza aplicando tu crema hidratante habitual.
Frecuencia de 1 a 2 veces por semana es suficiente para mantener la piel limpia y luminosa sin irritarla.