La poda es el secreto del éxito para cualquier vid.
Si no se poda, la planta crecerá mucho pero producirá pocos racimos.
Cuándo podar:
- En invierno, cuando la planta entra en reposo.
- También puedes hacer una poda ligera en verano para controlar el crecimiento.
Cómo hacerlo:
- Deja 2 o 3 ramas principales fuertes.
- Corta las ramas viejas o débiles.
- Deja entre 8 y 12 yemas por planta.
La poda ayuda a que la energía se concentre en los brotes que darán uvas de mejor calidad.
🌞 9. Guiar y sostener la vid
Como planta trepadora, la vid necesita un soporte o enrejado para crecer correctamente.
Puedes usar:
- Rejas metálicas.
- Mallas plásticas.
- Cuerdas o alambres entre dos postes.
- Pérgolas, ideales si quieres sombra y decoración.
Guía los tallos jóvenes con suavidad mientras crecen. En poco tiempo, tendrás una enredadera verde y frondosa que dará un toque mediterráneo a tu hogar.