Desmenucé dos paquetes de galletas y los cubrí con crema de chocolate: así nació el pastel frío más fácil y delicioso del mundo.

Esta es una de esas recetas que se te ocurren cuando tienes antojo de algo dulce al instante… pero no tienes tiempo ni ganas de encender el horno. Es cremosa, llena de chocolate (sin azúcar añadido, así que te sientes menos culpable) y, sobre todo, increíblemente fácil. La primera vez que la hice, rompí las galletas con la mano frente al televisor, sin mucho cuidado, y descubrí que precisamente esa textura “irregular” es lo que la hace especial.

Lo mejor es que al día siguiente está aún mejor, más fresca y firme: el único problema es sobrevivir las 6 horas en el refrigerador sin abrirla cada 10 minutos para comprobar su estado.

Este pastel frío de galletas y chocolate no necesita horno (solo un poco de paciencia en el refrigerador).

Pastel frío de galletas y chocolate

Tiempo
Preparación: 20 minutos

Reposo: al menos 6 horas en el refrigerador

Total: aproximadamente 6 horas y 20 minutos (aunque el trabajo real es mínimo)

Conservación
En el refrigerador: hasta 3 días, bien tapado

En el congelador: hasta 1 mes (en rebanadas, para descongelarlo cuando se necesite)

Ingredientes (para 8 porciones)

Para la base y el relleno

2 paquetes de galletas sin azúcar añadida

2 tazas de leche

2 cucharadas de eritritol (o azúcar de coco)

2 cucharadas de maicena

2 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar

100 g de chocolate negro sin azúcar añadida

Una nuez de mantequilla (opcional, pero le da brillo)

Para la cobertura

120 g de yogur natural

200 g Chocolate negro sin azúcar añadido

Preparación
Triturar las galletas

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