-
Clásico: mezcla azúcar glas con un poco de leche o jugo de limón y vierte sobre el donut.
-
De chocolate: derrite 100 g de chocolate con una cucharada de mantequilla y cubre la superficie.
-
De colores: añade sprinkles o coco rallado para un toque divertido y vistoso.
💡 Consejo del chef:
Para un resultado más tierno y alto, bate bien los huevos con el azúcar antes de incorporar los demás ingredientes. Esto ayuda a que la masa atrape más aire, logrando una textura más ligera y esponjosa.
🍩 Resultado final:
Un donut alto, esponjoso, dorado y con un sabor increíble. Perfecto para acompañar el desayuno, una merienda o para sorprender a tus invitados con un postre casero que todos adorarán.