1. Rallar el chocolate finamente. Batir la mantequilla o margarina ablandada, el azúcar, el azúcar vainillado y la sal.
Separar los huevos. Incorporar las yemas una a una. Incorporar el chocolate, las avellanas y la levadura química. Añadir el ron, si se desea. Batir las claras a punto de nieve y luego incorporarlas suavemente a la masa, por tandas.
2. Engrasar bien un molde desmontable de 26 cm (10 pulgadas). Verter la masa en el molde y alisar la superficie.
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Hornear en horno precalentado (eléctrico: 175 °C/350 °F, con ventilador: 150 °C/300 °F, termostato 2) durante aproximadamente 50 minutos. Dejar enfriar un poco el pastel en el molde. Luego, desmoldarlo y dejar que se enfríe por completo.
3. Escurrir las cerezas, reservando el jugo. Preparar un pudín con el jugo de cereza y el polvo para pudín.
Añadir las cerezas al pudín y dejar que se enfríe un poco. Extenderlo sobre la base de nueces mientras aún esté tibio y dejar que se enfríe por completo.
Hornear con las cerezas. Prueba también: El adictivo pastel de dátiles y nueces de la abuela
4. Monta la nata con el azúcar de vainilla y el estabilizador de nata hasta que esté firme y extiéndela uniformemente sobre la base del pastel. Luego, mezcla el ponche de huevo con 1 o 2 cucharadas de la mezcla para pudín instantáneo.
Pastel de Ponche de Huevo
Rocía la mezcla de ponche de huevo y alísala. Decora el pastel con nueces picadas o almendras tostadas y decoraciones de chocolate antes de servir.