Empecé a hacer conservas para no tirar tomates: ahora no puedo prescindir de ellos y ¡los conservo incluso durante todo el invierno!

Primero, coge la albahaca, el ajo y el chile (si lo usas) Y licúa todo. Debería obtener una consistencia cremosa, ligeramente rústica. Nada suave, eso sí; está bien, aunque quede un poco grumosa.

Coloca la mitad de esta crema en el fondo de los frascos (que deben estar esterilizados, ojo; yo los hiervo un poco o los meto en el horno caliente un rato; cada uno tiene su método).

Corta los tomates por la mitad. Sinceramente, no los pelo, pero si te molesta la piel, puedes escaldarlos primero y quitarles la piel. Me gusta conservarla porque le da un poco de textura.

Coloca los tomates en los frascos sobre el pesto de ajo y albahaca y luego cúbrelos con el resto de la crema.

Aparte, hierve una salmuera hecha con agua y sal durante 3 minutos. Una vez caliente, viértela en los frascos esterilizados casi hasta el borde, dejando solo un poco de espacio.

Déjalo reposar así durante 15 minutos. Luego, añado 3 cucharadas de vinagre blanco a cada frasco (directamente) y cierro bien la tapa.

En este punto, les doy la vuelta y los dejo enfriar por completo. Una vez fríos, los guardo en la despensa, en un lugar fresco y oscuro. Y después de abrirlos, por supuesto, los guardo en el refrigerador.

Algunos consejos más
Uso esta conserva prácticamente en todas partes. Ya está deliciosa sobre una rebanada de pan caliente, pero también queda genial en una ensalada fría con atún y cebolla, o en un plato sencillo de pasta. También queda bien con carne a la parrilla, como una salsa ligeramente rústica.

Ah, y una última cosa: ¡pruébala! Es decir, cuando hagas la crema de ajo y albahaca, prueba si te gusta o si necesitas ajustar algo. A veces, una pizca de sal extra o una hoja de menta (¡sí, eso también da para mucho!) marca la diferencia.

En resumen, no es una receta escrita a escala, pero es de esas que se transmiten de generación en generación, un poco a ojo. Pero cuando abres el frasco y hueles el aroma… bueno, entiendes por qué lo haces.

¡Feliz conserva! ¡Cuéntame si lo pruebas!

¿Cuáles son los ingredientes para hacer conserva de tomate?
Necesitas: 2 kg de tomates maduros, 1 o 2 chiles, 30 g de ajo, medio manojo de albahaca fresca, 1 litro de agua, 1 cucharada de sal y 6 cucharadas de vinagre blanco.

¿Cómo se prepara la conserva de tomate?

Mezcla la albahaca, el ajo y el chile. Vierte la mitad de la mezcla en frascos esterilizados. Corta los tomates por la mitad y colócalos en los frascos sobre el pesto, cubriéndolos con el resto de la mezcla. Hierve una salmuera con el agua y la sal durante 3 minutos y viértela en los frascos. Déjala reposar 15 minutos, añade el vinagre y cierra los frascos.

¿Cómo se conservan los frascos de tomate?

Después de cerrar los frascos, dales la vuelta y déjalos enfriar por completo. Una vez fríos, guárdelos en la despensa, en un lugar fresco y oscuro. Una vez abiertos, consérvelos en el refrigerador.

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