Vierte el yogur griego en un bol, añade la maicena y la vainilla, y mezcla con unas varillas hasta que la mezcla esté suave y homogénea.
Toma las claras de huevo que reservaste, añade una pizca de sal y bátelas a punto de nieve con una batidora eléctrica. En cuanto empiecen a formar espuma, añade poco a poco el edulcorante de stevia (o azúcar) y sigue batiendo durante al menos 7 minutos.
En este punto, incorpora las claras de huevo al yogur, haciéndolo gradualmente con una espátula y con movimientos envolventes de abajo hacia arriba para no desinflarlas.
Cómo montar el pastel
Una vez hecho esto, saca la base del congelador y rellénala con las manzanas y el relleno. Agrega el yogur griego, alísala y cúbrela con 1/3 de la capa rallada de masa congelada.
Finalmente, hornea en un horno precalentado a 180 °C durante 40 minutos. Deje enfriar el pastel durante al menos 30 minutos, luego retírelo del molde y espolvoréelo con un poco de azúcar en polvo.