Los científicos observaron que algunos pacientes que fueron reanimados tras varios minutos de muerte clínica (es decir, sin actividad cardíaca ni respiratoria) podían recordar detalles de su entorno, conversaciones del personal médico e incluso sensaciones corporales.
Lo más llamativo fue que algunos de estos recuerdos fueron verificados por testigos presentes, lo que sugiere que no se trataba únicamente de alucinaciones.
La conciencia más allá del paro cardíaco
Los hallazgos indican que la conciencia puede persistir brevemente incluso después de que el corazón deja de latir. Esto plantea interrogantes sobre el momento exacto en que ocurre la muerte desde una perspectiva neurológica.
Tradicionalmente, se pensaba que la actividad cerebral cesaba completamente al morir el corazón, pero este estudio demuestra que el cerebro puede seguir procesando información por un corto período.
Implicaciones filosóficas y médicas
Estos resultados no solo son relevantes para la medicina de urgencias y la reanimación cardiopulmonar, sino que también abren la puerta a discusiones filosóficas. Es decir, sobre la naturaleza de la conciencia y la vida después de la muerte.
¿Podría haber una base científica para las llamadas “experiencias cercanas a la muerte”? ¿Hasta qué punto la conciencia está ligada al cuerpo?