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Nata montada.
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Frutas frescas: fresas, mango o kiwi.
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Salsa de frutos rojos.
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Galletas trituradas o un toque de licor como ron o amaretto.
El flan en diferentes culturas
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México: con queso crema, más denso.
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España: más ligero, menos dulce.
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Cuba: clásico en celebraciones familiares.
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Filipinas: “leche flan”, cocido al vapor.
Conclusión
El flan de leche condensada es un postre que combina sencillez, tradición y sabor. Reúne a la familia alrededor de la mesa y permite crear momentos especiales. Con esta receta, sus variaciones y consejos, tendrás todas las herramientas para convertirte en un experto en flanes.
