La focaccia es uno de esos platos que siempre gusta a todo el mundo: suave, elástica e irresistible. ¿Pero qué tal si te dijera que puedes prepararla en una versión más ligera, sin harinas refinadas y con ingredientes sencillos? La focaccia de avena, mozzarella y parmesano es una variante sabrosa y más equilibrada que la clásica. En esta receta, utilizaremos copos de avena, transformados en harina, que le dan consistencia a la masa y son una excelente fuente de fibra y carbohidratos de absorción lenta, perfectos para mantenerte saciado durante más tiempo.
Gracias a la mozzarella y el parmesano, obtendrás una focaccia elástica y sabrosa, ideal como aperitivo, tentempié salado o plato principal ligero. Y no necesitas ser un experto en repostería: la receta es rápida y fácil, lista en menos de media hora, sin largos tiempos de levado.
Una receta que parece pizza, pero mucho más ligera: focaccia de avena con parmesano, lista en 20 minutos
Focaccia de avena y queso
Valores nutricionales (por ración, de un total de 4 – estimado)
Calorías: ~220 kcal
Carbohidratos: 18 g
Proteínas: 12 g
Grasas: 11 g
Fibra: 3 g
Ingredientes (para aproximadamente 4 raciones)
150 g de mozzarella rallada (o Galbanino light para una versión más ligera)
1 taza de copos de avena (aprox. 100 g)
1 taza de agua hirviendo (aprox. 200 ml)
Queso Parmigiano Reggiano rallado al gusto
Ajo en polvo al gusto
Sal al gusto
Preparación
– Preparar la harina de avena
Colocar los copos de avena en una batidora y triturar hasta obtener una harina fina. Tamiza la harina para eliminar los grumos grandes.
