Deja enfriar las galletas y sírvelas con café, leche o té.
Quedan crujientes por fuera, suaves por dentro y con un sabor increíblemente aromático.
💡 Consejos
-
Puedes sustituir la ralladura de limón por ralladura de naranja para variar el sabor.
-
No amases demasiado la masa para que las galletas no queden duras.
-
Guárdalas en un recipiente hermético para mantener su frescura durante varios días.