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Hornear demasiado: quedan secas.
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No enfriar la masa: se expanden demasiado.
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Exceso de harina: las endurece.
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No separar bien las galletas en la bandeja: se pegan entre sí.
Conservación
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Guardar en recipiente hermético hasta 5 días.
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Se pueden congelar hasta 2 meses.
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Truco: coloca un trozo de pan dentro del recipiente para mantenerlas suaves.
Ideas para Servir
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Con té o café en la merienda.
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Como regalo en cajas decorativas.
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Troceadas sobre yogur o avena.
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Acompañando helado de vainilla para un postre gourmet.
Conclusión
Las galletas de arándanos son el equilibrio perfecto entre sabor, nutrición y sencillez. Fáciles de preparar, versátiles y saludables, se convierten en una experiencia que une a familiares y amigos alrededor de un postre casero irresistible