Este guiso tiene raíces en la cocina mexicana, donde surgió como forma de aprovechar tortillas sobrantes. Con el tiempo se transformó en un plato estrella de reuniones familiares, adaptado en distintas regiones con variaciones propias, pero siempre con la esencia de un plato reconfortante.
Errores comunes al prepararlo
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No sellar la carne → queda seca.
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Exceso de líquido → demasiado aguado.
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Usar quesos que no funden bien.
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Añadir tortillas blandas sin tostar → se deshacen en el guiso.
Conclusión
El guiso de carne con tortillas y queso es mucho más que una receta: es una experiencia culinaria que combina tradición, sabor y creatividad. Fácil de preparar, con ingredientes accesibles y adaptable a todos los gustos, es un plato que siempre conquista.