-
Añade las rodajas de tomate a la sartén con las verduras cuando estas empiecen a dorarse, sin que se pongan blandas.
-
Espolvorea sal y orégano sobre los tomates.
-
Coloca una mitad de huevo sobre cada rodaja de tomate.
-
Añade queso rallado y una pizca de pimentón sobre los huevos.
-
Baja el fuego a bajo (número 2) y tapa la sartén.
-
Cocina durante 15 minutos para que el queso se funda y los sabores se mezclen.
6. Toque final
-
Espolvorea un poco más de orégano antes de servir.
-
Sirve con un par de mitades de huevo por ración y verduras a un lado.
Consejos
-
Asegúrate de que todas las verduras estén bien cocidas pero no demasiado blandas.
-
Puedes añadir más queso si quieres un plato más cremoso.
-
Este plato es ideal para sorprender a tus invitados y sirve como desayuno, brunch o cena ligera.