1️⃣ Preparar la base
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Tritura las galletas hasta obtener una textura fina.
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Añade la mantequilla derretida y mezcla hasta formar una masa arenosa.
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Incorpora los 100 g de maní tostado si deseas un toque extra de sabor.
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Coloca la mezcla en el fondo de un molde desmontable (22–24 cm) y presiona bien con una cuchara.
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Lleva al refrigerador mientras preparas la crema.
2️⃣ Preparar la crema
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En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta que quede suave y sin grumos.
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Añade la nata fría y continúa batiendo hasta lograr una textura espesa y cremosa.
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Vierte la mezcla sobre la base de galletas y alisa la superficie con una espátula.
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Refrigera durante al menos 2 horas (o 30 minutos en el congelador si tienes prisa).
3️⃣ Preparar la cobertura
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En un recipiente apto para microondas o al baño María, derrite el chocolate junto con la mantequilla hasta obtener una mezcla lisa y brillante.
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Deja enfriar ligeramente.
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Vierte la cobertura sobre la tarta y distribuye de manera uniforme.
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Añade los 100 g de maní tostado por encima para decorar.
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Refrigera nuevamente por 30 minutos antes de servir.
