Vierte el extracto caliente en un recipiente.
Añade la naftalina y revuelve hasta disolver por completo. Mezcla todos los ingredientes:
Pasa la mezcla a una botella PET limpia.
Agrega el vinagre, el alcohol y el detergente.
Agita bien hasta integrar todo. Aplícalo en las zonas clave:
Coloca en un atomizador.
Rocía ventanas, puertas, rincones, zócalos y zonas donde aparecen insectos. ¡Tu hogar quedará protegido de plagas sin productos tóxicos ni costosos!

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