Sus hábitos pasados y presentes le pasaron factura y su salud mental se deterioró. Tras un largo periodo de desesperación y pensamientos suicidas, la joven de 17 años intentó quitarse la vida. Fue internada en una institución psiquiátrica que utilizaba la terapia de conversión cristiana.
Tras salir del hospital, Mallette se puso en contacto con antiguos amigos y compañeros de trabajo que no seguían la misma religión recién descubierta que ella. Fue entonces cuando volvió a conectar con Jeremy Beiber.
A los seis meses de que la pareja empezara a salir de nuevo, Pattie se dio cuenta de que estaba embarazada. Justin nació en London, Ontario, el 1 de marzo de 1994. Aunque al principio Pattie y Jeremy siguieron juntos, finalmente decidieron romper pocos meses después del nacimiento de su hijo.
A pesar de todas las dificultades por las que había pasado, Pattie fue una madre comprensiva y presente. Ayudó a Justin en su afición por la música y le ayudó a presentarse al concurso de talentos Stratford Star 2007 cuando Justin era un adolescente.
El ahora cantante estrella quedó segundo por su interpretación de «So Sick», de Ne-Yo, y Pattie colgó el vídeo de su actuación ganadora en Youtube. El vídeo, además de los posteriores que siguió publicando online, ganó mucha popularidad con el tiempo.
La autobiografía de Mallette fue publicada en septiembre de 2012 por la editorial cristiana Revell. El libro, titulado «Nowhere But Up», se centraba no solo en la difícil educación de Pattie, sino también en cómo utilizó la fe y el amor para ganar optimismo y ser la mejor madre soltera que podía ser para su hijo. Hoy, su relación ha cambiado.
«Cuando tus hijos llegan a cierta edad tu estilo de crianza cambia y es difícil dejarlo ir», dijo Mallette a People en 2013, cuando su hijo cumplió 19 años. «Su vida era mi vida y ahora he tenido que dejarle ir un poco y dejarle ser independiente. Es duro no poder controlar todo lo que hace tu hijo adulto».