Ya sé, ya sé… el clásico pastel de zanahoria es delicioso, pero quería algo rápido, sin complicaciones, y sobre todo en versión “mini”. Así que, en vez de un pastel entero, preparé estas magdalenas. Solo seis: las justas para que no sobren, pero también las suficientes para que no se acaben enseguida (aunque, la verdad, vuelan igual).
Lo mejor de esta receta es su sencillez: pocos ingredientes, sin grasas añadidas, solo zanahorias, un poco de harina, ¡y listo! Quedan esponjosas, con el dulzor perfecto (gracias al eritritol, aunque puedes añadir azúcar o miel si prefieres), y esa textura ligera que te hace pensar: “Vale, solo me como una”… y luego repites. Perfectas para desayunar, para la merienda de los niños o como premio después de entrenar si te apetece algo ligero pero sustancioso.
Un bol y al horno: mis magdalenas de zanahoria sin mantequilla que siempre se agotan enseguida.
Muffins de zanahoria
Tiempo y calorías (aproximados)
Preparación: 10 minutos
Cocción: 30 minutos
Total: 40 minutos
Rinde: 6 muffins
Calorías: aproximadamente 90-100 kcal cada uno (dependiendo de si usas miel, azúcar o eritritol)
Ingredientes (para 6 muffins)
100 g de harina de trigo
1 huevo
130 g de zanahorias peladas
Medio sobre de levadura en polvo (unos 8 g)
80 g de eritritol (o azúcar, o 2 cucharadas de miel)
50 g de leche
Si lo prefieres, puedes sustituir la mitad de la harina por harina integral para un sabor más rústico.
Un poco de ralladura de naranja le da un toque especial (lo probé y desprende un aroma maravilloso).
Preparación