El pastel de ricotta es una excelente opción para quienes buscan un postre nutritivo, ligero y equilibrado, perfecto para la salud metabólica. Gracias a la ricotta, fuente de proteínas de alto valor biológico y calcio, este postre ayuda a promover la saciedad, fortalecer la masa muscular y mantener estables los niveles de azúcar en sangre, especialmente cuando se elabora con edulcorantes alternativos como el eritritol.
El uso de harina tipo 1 o tipo 2, menos refinada que la harina blanca, proporciona una mayor ingesta de fibra y micronutrientes, beneficiosos para el control glucémico y la salud intestinal. Ideal para quienes siguen una dieta baja en calorías y bajo índice glucémico, o simplemente desean evitar picos de insulina después de las comidas, este pastel también es apto para personas con intolerancia a la lactosa (que usan ricotta sin lactosa) o para quienes siguen una dieta baja en carbohidratos, con pequeños ajustes.
Pastel de ricotta suave y ligero. Llevo una semana tomándolo para desayunar y merendar: ¡no parece estar relacionado con ninguna dieta! Pastel de Ricotta
Tiempo de preparación
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 35-40 minutos
Tiempo total: aproximadamente 55 minutos
Raciones: 6-8 raciones
Calorías
Calorías totales: aproximadamente 1100 kcal (varía según los ingredientes)
Calorías por 100 g: aproximadamente 180 kcal
Ingredientes
150 g de ricotta de leche de vaca (puede ser sin lactosa, si es necesario)