-
Sabor: Prueba añadir cacao en polvo, ralladura de limón, fresa o cualquier esencia que te guste.
-
Color: Puedes agregar unas gotas de colorante alimentario para crear malvaviscos de colores divertidos.
-
Textura: Si quieres malvaviscos más firmes, deja que reposen un poco más. Para más suaves, córtalos antes de que se enfríen completamente.
Preparar malvaviscos caseros es una experiencia divertida que combina ciencia y creatividad. ¡Sorprende a tu familia y amigos con estas dulces nubes hechas en casa!