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Coloca el huevo en el vaso de la batidora o licuadora (muy importante que esté a temperatura ambiente).
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Añade el vinagre o el jugo de limón, una pizca de sal y el aceite.
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Introduce el brazo de la batidora hasta el fondo del vaso.
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Bate sin mover durante unos segundos, hasta que empiece a emulsionar.
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Cuando veas que la mezcla se vuelve espesa y cremosa, mueve suavemente el brazo de la batidora hacia arriba y abajo hasta integrar todo el aceite.
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Prueba y ajusta de sal o acidez si es necesario.
¡Y listo! En menos de cinco minutos tendrás una mayonesa casera cremosa, natural y deliciosa.
🍋 Consejos para una Mayonesa Perfecta
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Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente, especialmente el huevo.
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Si la mayonesa se corta, no te preocupes: coloca otro huevo en un vaso limpio y añade poco a poco la mayonesa cortada mientras bates.
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Usa aceite de girasol para un sabor más suave, o aceite de oliva suave si prefieres un toque más intenso.
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Guarda la mayonesa casera en la nevera y consúmela en un máximo de 2 a 3 días.